Historia Dramática.
Una pareja muy enamorada se encontraba en su casa pensando en
cosas de tortolitos como ^^Yo siempre estaré a tu lado^^ o ^^No te separes de
mi^^
Se llamaban Aiden y María, se sentían los más afortunados del
mundo por estar el uno al lado del otro, Aiden trabajaba en una oficina del
centro de la ciudad, y María trabajaba en una pequeña tienda de ropa, cuando
acababan sus turnos él a las 7 de la tarde y ella a las 8:30 de la tarde,
volvían a su casa para descansar y estar juntos otra vez.
Los días laborales cocinaba Aiden pues
llegaba antes a casa, y los fines de semana cocinaba María.
Entonces ocurrió algo inesperado pero que
los dos llevaban pensando mucho tiempo. Aiden al terminar de cenar un sábado se
arrodillo y sacando una estuche pequeño azul de terciopelo la abrió y se vio un
anillo de oro brillante, y dijo las palabras que deseaba oír María.
-María quieres casarte conmigo y pasar el
resto de tu vida complementando la mía en la salud y la enfermedad, en la riqueza
y en la pobreza hasta que solo la muerte nos pueda separar
La reacción de María fue abalanzarse a los
brazos de Aiden gritando
-Si siempre junto a ti. Aiden la miro a los ojos y María a él y
entrelazando sus dedos se besaron.
Dos semanas más tarde se casaron y todo
era perfecto, en su viaje de novios viajaron a Asia más concreta-mente a
Tailandia pero mientras viajaban ocurrió algo que acabo con sus vacaciones
empezaron a aparecer soldados por las calles disparando contra la policía,
corrieron y se refugiaron en una tienda que estaba cerca María se agacho y cerró
los ojos, pero Aiden miro, no podía apartar la mirada estaba aterrorizado.
Lo que era la calle de colores vivos y
sonidos de vendedores anunciando sus productos, se convirtió en una
vorágine de balas y explosiones que duro largos 15 minutos. María no miro pero
Aiden miro como la calle se convertía en un pasillo pintado de rojo por la
sangre de los que murieron en esa injustificada matanza, los cuerpos caídos
formaban una alfombra por toda la calle tanto policías, como soldados, como
civiles que se vieron involucrados.
Cuando acabo Solo quedo un silencio
sepulcral a excepciona de alguna gota de sangre que se resbalaba de las paredes
y hacia ruido al chocar con el suelo. Aiden se acercó a la puerta desde donde
lo vio todo y la cerro con furia. María levanto la cabeza pero al cerrar la
puerta fue afortunada de no ver lo mismo que Aiden, María le miro y noto algo
raro en él, una mirada en blanco que no expresaba ningún sentimiento aparte de
incontable terror, María no se atrevió a abrir la puerta pero sabía que Aiden
no se lo iba a permitir, se quedaron en la tienda durante dos horas en todo ese
tiempo nadie digo nada, pero Aiden temblaba, María no sabía que decir a sí que
se acercó e intento abrazarle, pero Aiden se apartó, y dijo tembloroso:
-No, No, No quiero que me toques No aun no, espera, pero no te
vallas, No, No te vayas como todos ellos.
María rectifico el abrazo,
e intento hablar con él:
-Aiden si necesitas hablar con mi.... Aiden le grito
-NO, NO PARA DE HABLAR NO QUIERO MAS VOCES DE LAS QUE YA HAY.
Se tranquilizó y respiro seguidamente dijo :
-María ¿acaso tú no los oyes?
María negó con la cabeza y
dijo ¿qué voces?
Aiden tembló y susurro:
-Las voces de la calle.
María llevaba dos horas sin oír a nadie, y
se lo dijo:
-Aiden no hay nadie solo tú y yo.
Él se sobresaltó y dijo
-No tú también no, María tu no, ¿Por qué tú?
María cada vez estaba más
asustada así que le pregunto a Aiden:
-¿Que dicen las voces Aiden?
Aiden coloco una sonrisa
desencajada en su rostro y le dijo muy calmado a María:
-Mátalos, mátalos. a todos así estarás en silencio, no, no, mejor aún,
Mátala, MÁTALA.
María se alejó y dijo:
-Aiden ¿A quién quieren matar?
Aiden le dijo:
-A TI MARÍA, A TI
María aterrorizada se quedó quieta, y
Aiden se acercó a ella con un trozo de cristal roto que había en el suelo lo
agarro tan fuerte que se cortó la mano, pero pareció no importarle.
María no podía mover ni un musculo, estaba
viendo como su marido se acercaba para matarla y aun así no podía moverse.
Cuando casi estaban juntos María dijo casi
susurrando:
-Hasta que la muerte nos separe.
Aiden dejo de avanzar y dijo tembloroso:
-María lo siento no puedo vivir con estas voces y no puedo vivir
sin ti.
María le miro a los ojos y estaban completamente vacíos.
Aiden la miro y grito:
-LO SIENTO, PERDÓNAME.
Aiden se cortó el cuello suicidándose, Aiden en el suelo a punto
de morir dijo a María:
-Lo siento María por ser débil pero lo he conseguido por fin
silencio.
María intento tapar la raja del cuello
pero ya era tarde estaba muerto. Ella no se lo creía se decía a si misma:
-Esto es una pesadilla, no puede ser real.
Se le ocurrió una idea, si esto es una pesadilla solo tendría que
morir para escapar de ella.
María agarro el cristal con el que su
marido se quitó la vida y pensó:
-Ahora me despertare contigo en la cama.
Y se suicidó.
La pareja que estaban de viaje de novios acabó
suicidándose consumidos por la locura.
Por:
Andrés Córdoba 4ª de la eso A